Por el personal de MC USA
(Iglesia Menonita de EE. UU.) – La propagación de un nuevo coronavirus ha generado preocupación en todo el mundo. La Iglesia Menonita de EE. UU. (MC USA) ofrece la siguiente información proveniente de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CCPEEU o CDC, por sus siglas en inglés) con el fin de empoderar a las conferencias y congregaciones con información precisa y confiable para ayudar a evitar la propagación de la COVID-19 y atender a aquellos que se enferman.
¿Qué son los coronavirus?
Los coronavirus son una extensa familia de virus que provocan enfermedades respiratorias. Los virus son comunes en personas y ciertos animales, como los murciélagos. Un nuevo virus que ha sido denominado “SARS-CoV-2” causa la “enfermedad del coronavirus 2019” (abreviada “COVID-19”).
La Organización Mundial de la Salud declaró un brote de la COVID-19 en enero del 2020. El epicentro del brote fue Wuhan, provincia de Hubei, China. Desde entonces, la enfermedad se ha propagado a otras regiones del mundo, incluyendo Estados Unidos.
¿Cómo se propaga?
Dado que el SARS-CoV-2 es nuevo, los funcionarios de la salud aún están aprendiendo exactamente cómo se propaga. Según los CDC, el virus se propaga principalmente entre personas que están en contacto cercano (a unos 180 cm), a través del tacto o cuando una persona infectada tose o estornuda. También puede propagarse al tocar superficies y objetos contaminados.
¿Cuáles son los síntomas?
Algunos de sus síntomas son: fiebre, tos y dificultad para respirar. Los síntomas pueden aparecer entre 2 y 14 días después de la exposición.
¿Quiénes están bajo mayor riesgo?
Si bien el virus es nuevo, infectarse la COVID-19 no es una sentencia de muerte automática. Sin embargo, los ancianos y aquellos que tienen condiciones de salud subyacentes están bajo el mayor riesgo. Otras personas que han contraído la enfermedad se han recuperado.
¿Existe una vacuna disponible?
No existe una vacuna para prevenir la infección de la COVID-19. Cuando se desarrolla una vacuna posible, se deben realizar pruebas rigurosas antes de hacer pública cualquier vacuna. Los CDC estiman que se tardará entre 12 y 18 meses en poder ofrecer al público la posibilidad de una vacuna.
¿Cómo puedo protegerme de una infección?
- Evite exponerse al virus respiratorio.
- Lávese las manos frecuentemente con agua y jabón durante al menos 20 segundos.
- Use un desinfectante de manos a base de alcohol.
- Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca si no se ha lavado las manos.
- Evite el contacto cercano con personas enfermas, sobre todo con las que presentan síntomas.
- Quédese en su casa si está enfermo.
- Cúbrase la nariz y la boca con un pañuelo desechable al toser o estornudar y luego bótelo a la basura.
- Limpie y desinfecte los objetos y las superficies que se tocan con frecuencia.
- Tenga un plan de preparación para su familia.
Recursos para líderes de iglesias y comunidades
Los CDC ofrecen los siguientes consejos para iglesias y espacios comunitarios de encuentro:
- Pásele un trapo con productos de limpieza a todo lo que los feligreses tocan, como los picaportes de las puertas, los lomos de los bancos de la iglesia y las barandas.
- Evite los abrazos y los apretones de manos. Solo salude con un gesto o inclínese.
- Aliente a las personas a lavarse las manos. Coloque recordatorios por toda la iglesia. Hay recursos disponibles para compartir sobre el lavado de las manos, creados por los CDC.
- Ponga desinfectantes de manos en toda la iglesia.
- Coloque cajas de papel tisú en todos los bancos de la iglesia.
- Limite las reuniones grandes que no sean esenciales.
- Organice teleconferencias o videochats.
- Repase los planes operativos de emergencia y los planes de comunicaciones de su iglesia.
- Aconseje a los miembros de la congregación que repasen sus planes de emergencias familiares.
- Desaliente el pánico y el miedo.
- No difunda información falsa.
- Anime a los miembros de la congregación a buscar información únicamente de fuentes confiables, como los CDC y la Organización Mundial de la Salud.
Para ver una lista de recursos de los CDC y otras agencias/organizaciones, visite la página web del MHS sobre la COVID-19.
Existe orientación adicional específica para los líderes de iglesias y comunidades brindada por los CDC aquí.
Everence también ofrece un documento descargable de consejos en español , titulado “Manejo de la COVID-19: Cuidar de nosotros mismos y de los demás” (disponible también en inglés).
Si busca recursos gratuitos para ayudar a calmar los temores de su congregación, descargue el estudio Beyond Our Fears: Following Jesus in Times of Crisis, de MennoMedia. Para los niños, también puede descargar de manera gratuita Don’t Be Afraid: Stories of Christians in Times of Trouble.
La Iglesia Menonita de Canadá también ha puesto a disposición una lista de recursos , la cual incluye una sección sobre cómo equipar a iglesias.
Consejos de limpieza para el trabajo y el hogar
Limpie superficies que estén visiblemente sucias con detergente o jabón en primer lugar, y luego desinfecte. Use guantes descartables durante la limpieza. Existe una lista completa de desinfectantes registrados de la Agencia de Protección Ambiental.
Guía para empleadores
La “Guía interina de planificación y respuesta a la enfermedad del coronavirus para empresas y empleadores” de los CDC está disponible aquí (en inglés).
Advertencias para viajeros
Las noticias y recomendaciones de los CDC para viajeros pueden seguirse aquí (en inglés).
Si está planeando hacer un viaje al extranjero, consulte las advertencias de viaje del Departamento de Estado de EE. UU. para su destino deseado (en inglés).
Oración
El Congreso Mundial Menonita ha llamado a las congregaciones anabautistas y menonitas de todo el mundo a unirse en oración. Lo invitamos a hacer y compartir la siguiente oración:
Oramos por las personas de EE. UU. y de todo el mundo que han sido impactadas por el coronavirus. Oramos por aquellos que han perdido a seres queridos, para que reciban consuelo, y por aquellos que han sido puestos en cuarentena y padecen la soledad. Oramos por la sanación de aquellos que están enfermos. Oramos pidiendo seguridad, fuerza y compasión para los trabajadores médicos que podrían sentirse abrumados al atender a aquellos que batallan contra varias enfermedades, y para los trabajadores que están expuestos a riesgos mayores. Oramos por nuestros funcionarios públicos, que actúen con compasión y sabiduría mientras trabajan para contener el virus. Oramos por aquellos que no tienen acceso a la atención sanitaria y por aquellos que no saben cómo harán en caso de que se enfermen y no puedan ir a trabajar. Oramos por tu paz, que resguarde nuestros corazones y mentes, para que la ansiedad y el temor no nos superen.
Dios, inspira en nosotros modos de manifestarnos tu amor unos a otros y hacia nosotros mismos. Guía nuestros corazones y nuestras acciones hacia un mayor cuidado, mayor bondad y mayor generosidad en medio de estos temores e incertidumbres.