por Adriana Celis
Los días 13 y 14 de abril de 1973 algo sin precedentes en el mundo hispano menonita inició. un movimiento de mujeres deseosas de experimentar cambios extraordinarios en sus comunidades de fe, en su ciudad y en esta nación. Gracias a ello, este año se celebró con bombos y platillos los 50 años de la Conferencia Femenil Hispana, en donde mujeres de diferentes partes de los Estados Unidos se reunieron con el propósito de conectar con mujeres latinoamericanas. El objetivo de este espacio fue crear lazos de pertenencia y gozar de tiempos de adoración a Dios, al mismo tiempo de establecer relaciones duraderas para los años venideros. Este sueño, inició gracias a la valentía y persistencia de María Burgos, en la iglesia Menonita Templo de Alabanza, de Moline Illinois. María fue una mujer generosa, arriesgada y perseverante en llevar a cabo esta misión que hoy por hoy ha trascendido en el tiempo.
Grandes cosas ha hecho el Señor
La conferencia, este año, tuvo lugar en la ciudad Rock Island, Illinois, bajo el lema «Grandes cosas ha hecho el Señor», basado en el texto bíblico de Éxodo 3:10. El primer día, se llevó a cabo el tiempo de encuentro en la iglesia Templo de Alabanza, de Moline Illinois, y los días posteriores en las instalaciones del hotel Holiday Inn, en la ciudad de Rock Island.
La apertura estuvo cargada de grandes momentos en conmemoración por la fidelidad de Dios durante estos cincuenta años ,también hubo momentos de adoración a cargo de los pastores Alberto Parchmont y Fernando Ramos. La oradora fue Ana Ramos quien llevo un mensaje desafiante, en el cual invitó a las asistentes a dejarse usar por Dios sin ninguna reserva. Adicionalmente, en la conferencia hubo momentos para aprender sobre el rol de la mujer que transforma y sobre el liderazgo y el abuso, dichos talleres fueron presentados por la pastora Madeline Maldonado de la iglesia College Mennonite de Goshen IN.
Negocios
En el mismo orden, se abrió a discusión la elección de la nueva Mesa Directiva, la cual quedó establecida de la siguiente forma: Graciela Tijerina, Coordinadora; Madeline Maldonado, Coordinadora Electa; Elizabeth Soto, Tesorera; Érica Serrano, Secretaria; y, Martha Hernández como mentora/vocal.
Tiempo de celebración
Durante la convención no solo se tomó el tiempo para el sano esparcimiento; además, entre las asistentes se realizó un bazar en el cual se ofertaron artículos para el hogar y accesorios para mujeres. Acto seguido se dio el tiemplo para la fiesta de gala, en donde el color que predominó fue el azul oscuro y oro. Por otro lado, se dio la competencia de los estandartes donde las participantes, a través del arte manual, representaron las cosas maravillosas que Dios creador ha hecho. Los ganadores que obtuvieron el primer lugar fueron: Jesús el Buen Pastor, de Muscatine IA; y, el segundo lugar, Templo de Alabanza Mennonite, Moline IL.
Honores a Martha Hernández
No es un secreto que Martha Hernández ha desempeñado un papel muy importante en los últimos años, tanto como en la planeación como en la ejecución de la Conferencia. Por este motivo Martha fue honrada no solo por su trabajo duro, sino porque en los momentos donde pudo haberse rendido y no trabajar más, ella se levantó en fe y continuó su trabajo para expandir la obra de Dios en la tierra.
Martha, a viva voz, expresó: «Hubo momentos donde mis fuerzas desfallecieron, pero tomé la decisión de seguir y dejar que Dios me usara y renovara mis fuerzas en la forma que solo él puede hacer».
Desde MenoTicias damos gracias a Dios por la vida de Martha Hernández, una mujer resiliente, la cual pudo haberse rendido ante los mares embravecidos que se levantan en la vida; pero ella, a pesar de las turbulencias, decidió continuar valiente ante el supremo llamamiento que Dios hizo a su vida, desde una edad muy temprana.