Estimados miembros de la Iglesia Menonita de EE. UU.:
Al final de MennoCon19, presenté #BringThePeace (Traigan la paz). Las noticias en torno al coronavirus pueden generar temor. En tiempos de crisis y miedo, la iglesia puede ser una presencia tranquilizadora, y debería serlo.
¿Cómo procede uno en esta era de incertidumbre?
Sean inteligentes al elegir las formas de adorar y reunirse. La propagación de un nuevo coronavirus ha generado preocupación en todo el mundo. La Iglesia Menonita de EE. UU. (MC USA) ofrece la siguiente información proveniente de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CCPEEU o CDC, por sus siglas en inglés) con el fin de empoderar a las conferencias y congregaciones con información precisa y confiable para ayudar a evitar la propagación de la COVID-19 y atender a aquellos que se enferman. Repasen nuestra guía de recursos sobre el coronavirus. Aliento especialmente a los líderes de iglesias a revisar las prácticas vinculadas a la Santa Cena y a las comidas durante este tiempo.
Desarrollen un plan de cuidado pastoral. Si bien no está claro qué depara el futuro en cuanto a la transmisión de este virus, los CDC han determinado que la COVID-19 es una grave amenaza para la salud pública. Según lo que he estado oyendo de parte de expertos médicos y de lo que he leído, existen altas probabilidades de que muchos de nuestros miembros resulten afectados por este virus en el transcurso del próximo mes. Las conferencias y congregaciones deben planificar cómo apoyar a los líderes, miembros y familias impactadas por el virus. La enfermedad no es el único impacto. Las personas de algunas industrias podrían sufrir en términos financieros, y algunas personas podrían quedar bajo cuarentena u otras formas de aislamiento. Tenemos que apoyarnos unos a otros y a nuestras comunidades.
Sean flexibles y sean fuertes. Las noticias vinculadas al virus parecen modificarse todos los días, y aún en cuestión de horas. Necesitamos mantenernos actualizados para responder de manera adecuada como cuerpo de Cristo. A su vez, también es necesario que seamos una presencia tranquilizadora en nuestras comunidades. “Porque no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”. 2 Timoteo 1.7 (RVC). Estoy orando por nuestra iglesia y por todos aquellos que han sido impactados por la COVID-19. También me lavo las manos. Al combinar nuestra fe con nuestra sabiduría podremos superar esta crisis.
Este es el momento para que la iglesia sea la iglesia, no para que nos volvamos hacia adentro. Como ministros y creyentes de las buenas nuevas, nuestra luz brilla más en tiempos de oscuridad. Que estén bien, amigos míos, y estén a salvo durante este tiempo. Esto también pasará.
Les deseo salud y paz,
Glen Guyton
Director ejecutivo de MC USA