por Adriana Celis
Fotografía por: Claudio Schwarz en -Unsplash
El día de Acción de Gracias se celebra en cada rincón de los Estados Unidos de América. La celebración tiene como fecha fija en el calendario, el cuarto jueves de noviembre, y reúne básicamente dos aspectos: dar gracias por la abundancia recibida durante el año y estar alrededor de la familia. Esta fiesta en particular es la puerta que abre las festividades de fin de año. En esta temporada Estados Unidos es testigo de una verdadera revolución comercial y turística, ya que miles de personas empiezan a realizar preparativos para desplazarse hasta su lugar de encuentro. No obstante, reconociendo la realidad de la población que se encuentra en Estados Unidos, me pregunto ¿Cómo es vivir esta celebración siendo inmigrante?, ¿será posible vivir este día desde la latinidad?
Aunque esta celebración es muy popular y bastante bien recibida, para algunas personas que no tienen su familia cerca, ya sea porque viven en condición de inmigrante o no tienen a nadie más con ellos, esta fecha puede ser bastante difícil. No obstante, no significa que no se pueda celebrar; al contrario, es una oportunidad para reflexionar cuán bueno fue Dios durante el año. También exhibe la posibilidad de crear su propia celebración en donde involucre elementos propios de la cultura a la que pertenezca; en este caso, la cultura hispanoamericana a través de sus propias comidas, con aromas y sabores únicos que representan a Latinoamérica en Estados Unidos y que pueden coexistir en perfecta armonía.
En este mismo sentido, es una ocasión única para que la iglesia abra las puertas de sus sedes y muestre su lado más empático y compasivo con aquellos para quienes estas fechas son difíciles, al ser un hogar para los que no tienen uno, al amar incondicionalmente como Dios solo sabe hacerlo creando vínculos a través de un plato caliente de comida, alrededor de una grata conversación. Seguramente que estas acciones marcarán un antes y un después en la vida de muchos que han experimentado la soledad, tristeza y nostalgia por no tener a su familia presente.
Desde el equipo de MenoTicias les deseamos un grato y cálido tiempo de Acción de Gracias, en donde esperamos que se regocijen en la fidelidad de Dios, sabiendo que Él fue bueno todo el año y es posible expresar gratitud hacia Él en el amor y compañerismo con los que más lo necesitan.
